A Moisés le enseñaron toda la sabiduría de los egipcios y se convirtió en un hombre poderoso en sus hechos y palabras. Quizás Moisés pudo haber sido el sucesor del Faraón, además era el protegido de su hija, pero Dios lo tenía para cosas mucho más grandes, pues llegó a ser el libertador de los hebreos y fue un gran pastor en el desierto, siendo el hombre más importante de su historia religiosa. Descubre para que eres bueno, estudia y ponte en las manos de Dios para ser su instrumento. "Señor que se cumpla tu voluntad en nosotros" Amen
Hechos 7:22