El salmista dice: ¡Yo te invoco porque tú me respondes, Dios mío! muestra las maravillas de tu amor. Guárdame como la niña de tus ojos, a la sombra de tus alas escóndeme. Hay dos figuras enternecedoras que usa el salmista; cuídame como la niña de tus ojos, denota la confianza que el salmista tiene en su Dios y la otra es la figura y majestad del Águila, recordando las palabras del éxodo "yo los llevare en alas de Águila y los protegeré. En estos días de incertidumbre y temor oremos” Señor sé que soy tu hijo y me cuidaras hoy descanso en ti y me refugio bajo tus poderosas alas" Amén
ICDC Berna